Legado

El vino que nació de una familia, una tierra y una convicción.

En el Valle Central de Tarija, donde el sol cae tibio sobre las laderas y el aire huele a tierra buena, en esta sucursal del cielo,  la familia Trigo encontró un lugar para echar raíces. La Querencia no era solo una propiedad: era un refugio, una promesa, el comienzo de algo que aún no tenía nombre pero ya tenía destino.

Entre esos suelos fértiles comenzaron las primeras labores agrícolas, sin imaginar que, décadas después, allí se levantaría una bodega que llevaría el apellido familiar más lejos de lo que ninguno soñó.

Con el tiempo, las alturas —casi 1.900 metros sobre el nivel del mar— se convirtieron en aliadas. Se plantaron las primeras cepas: Cardinal, Italia, Syrah, Tannat. Al inicio, la intención era sencilla: producir buena uva. Pero la tierra insistía en decir algo más. Había carácter, había elegancia, había una historia esperando ser contada en vino.

Y quien supo escucharla fue Rodrigo Trigo, el Barbacana

La barba de Rodrigo canó con sacrificio, adquiriendo la madurez y la sabiduría que la tierra y la vid te exige, con la espalda sujeta a los suyos, con el temple noble del alma cantora y risueña y con el aire puro de los valles donde reposa el sueño en sus plantaciones y la bodega.  El campo fue su escuela, la vendimia su ritual y la elaboración artesanal su manera de honrar la vida.

2013

El primer intento

En 2013 llenó apenas 300 botellas de un vino que bautizó San Bernardo de la Frontera, sin saber que ese primer intento iba a encender el camino de una marca que pronto tendría alma propia.

2015

El impulso y el inicio de Barbacana

El reconocimiento no tardó. En 2015, su Syrah 2014 fue elegido como el mejor varietal de la Vendimia. Y esa pequeña victoria se sintió como un abrazo del destino: la señal de que era tiempo de construir algo más grande.

Así nació formalmente Bodega Barbacana, con una premisa innegociable: producir vinos de altura, en pequeñas partidas, con una identidad que no se diluya. Vinos que cuenten la verdad de su tierra.

2016

Nace el primer predilecto

En 2016 llegó uno de los hitos que marcaría la historia: el primer Tannat Reserva, un vino que no solo conquistó paladares, sino que se convirtió en símbolo de la casa. Elegante, complejo, poderoso… una declaración de intenciones.

2016 - 2021

El crecimiento

Luego vendrían nuevas líneas, como Cofradía, pensadas para quienes buscan vinos jóvenes, frescos y accesibles. Y también nacería el Singani de Barbacana, que con el tiempo sería premiado dentro y fuera del país.

2022

Abrimos La Casa al Enoturismo

La bodega abrió sus puertas al público, y los caminos de tierra comenzaron a llenarse de visitantes que buscaban vivir la experiencia completa: caminar entre viñedos, entender el proceso, degustar vinos que saben a familia, a altura, a Tarija.

 

2022 - 2025

Consolidación

Los premios siguieron llegando. Medallas de Gran Oro, Oro y Plata. Y luego, las más esperadas: dos Oros en Catad’Or, el concurso más prestigioso de Latinoamérica. Después, llegarían otros reconocimientos en Chile y Brasil, que elevaron aún más el nombre de Barbacana.

Asimismo consolidamos nuestra expansión al mercado nacional; llegando al eje troncal del país La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Sucre.

Nov 2025

El sueño de llegar al mundo

Los vinos de Barbacana cruzaron océanos para llegar a Japón. Nuestros vinos emprendieron un viaje histórico que marcó el inicio de la internacionalización de la bodega.

Barbacana Hoy

Hoy, Barbacana es una de las bodegas boutique referentes de Tarija. Una marca joven, moderna y profesional, construida con manos familiares, visión clara y un profundo respeto por la tierra que la vio nacer.

Porque aquí, cada botella cuenta una historia, con un sueño, una familia y un valle que lo hizo posible; un legado de tierra, vid y amor de familia.

Premios

Cantalavi

Tannat Reserva

Singani premium

Tannat Reserva

Syrah Reserva

Singani Premium